Un Iveco Trakker Bicombustible Diésel-Etanol para Brasil
· Porcentaje 60-40% de Diésel-Etanol · Los primeros ensayos muestran un reducción del 6% del coste de combustible · El Diésel-Etanol es la solución más adecuada para los productores de azúcar de caña Iveco, FPT Industrial y Bosch presentaban, la semana pasada, el Iveco Trakker Bicombustible Diésel-Etanol en Agrishow 2011, la feria más grande del sector agrícola que se desarrolla en Ribeirão Preto, Brasil. El vehículo está equipado con motor Cursor 9 de FPT Industrial y utiliza una combinación de Diésel-Etanol con costes operativos reducidos respecto a un motor diésel tradicional. Diseñado para responder a las demandas específicas de los productores de la industria del azúcar de caña y del etanol, el vehículo ha utilizado, en los primeros ensayos realizados, una media de un 60-40 % de mezcla Diésel-Etanol, lo cual contribuye a reducir el uso de combustibles fósiles y constituye una solución interesante para la protección del medio ambiente, al ser el etanol un combustible completamente renovable. El Trakker Bicombustible Diésel-Etanol ha sido desarrollado en Brasil con el soporte institucional de UNICA, la asociación brasileña de productores de azúcar de caña, en el ámbito de un programa de promoción de la política ecológica en el sector. Iveco comenzó, en 2010, a diseñar el motor Bicombustible, en colaboración con FPT Industrial y Bosch, y el prototipo se pondrá a prueba durante la recogida de azúcar de caña de 2011 por parte de Raizen, una sociedad en joint venture constituida por Cosan – el mayor productor de azúcar de caña de Brasil – y por Shell. Actualmente, el porcentaje de 60-40% de Diésel-Etanol garantiza una reducción del 6% del coste del combustible en el ámbito de las actividades de las plantaciones de caña de azúcar. “Estamos todavía en las primeras fases de desarrollo – declaraba Renato Mastrobuono, Director de Desarrollo de Producto de Iveco en América Latina – y, obviamente, esperamos alcanzar porcentajes más altos de uso del Diésel-Etanol con unos costes operativos derivados aún más reducidos”. El prototipo del Iveco Trakker Bicombustible se ha realizado en un vehículo 6x4 con MMA de 63 Tn., equipado con motor Common Rail Cursor 9 de 360 CV, que se puede utilizar en numerosas actividades en las plantaciones de caña de azúcar, como por ejemplo en el transporte de productos líquidos con cisterna. El vehículo está dotado de dos depósitos (uno para el diésel y otro para el etanol) y presenta una centralita para la gestión de cada combustible, un sistema de alimentación del etanol y una sonda lambda en el tubo de escape. El etanol se inyecta directamente en el colector de aspiración durante la fase de aspiración; tras la fase de compresión, el diésel se introduce en la cámara para activar la combustión. Además, no es necesario añadir ningún aditivo antidetonante. “Otra ventaja de la tecnología Bicombustible Diésel-Etanol – concluía Mastrobuono – es que el motor se puede convertir completamente para su uso sólo con diésel y esto hace que resulte más fácil revender el vehículo”.