Iveco Stralis: una gama de carretera íntegramente renovada en cuatro años

El lanzamiento de la gama Stralis representa el perfecto colofón del proceso que ha llevado a renovar los
vehículos pesados de carretera de Iveco, proceso que se inició en 1998.
Las etapas anteriores consistieron en la presentación de los tres motores de la familia Cursor (de 240 a
480 CV), los nuevos cambios de velocidad automáticos, el sistema de freno de cuatro discos y control
electrónico, y la incorporación de sistemas electrónicos para la gestión y la interacción de los componentes
de la cadena cinemática y del bastidor.
En la etapa actual se han incorporado novedades tan importantes como las anteriores y, en cierto sentido,
incluso más espectaculares, ya que también afectan al aspecto exterior de los vehículos. Entre ellas
destacan:
- la cabina, su diseño exterior y sus características aerodinámicas
- el puesto de conducción y el tablero de instrumentos
- el espacio habitable en la cabina
- la oferta de motorizacion es, que incorpora la versión 540 CV del Cursor 13
- el uso de la electrónica en el conjunto de las funciones relativas a la gestión del vehículo: el
Multiplex.
Para coronar este ciclo de renovación, Iveco ha cambiado su criterio de denominación, bautizando a su
nueva gama de camiones pesados "Stralis".
Desde las fases iniciales de este proyecto, Iveco persiguió tres objetivos muy concretos:
- ofrecer vehículos cada vez más adaptados a la evolución del transporte;
- reducir los costes de uso (consumo de carburante y de aceite);
- reducir los costes de mantenimiento (asistencia e inmovilizaciones en taller).
En el transcurso de estos cuatro años, los avances han sido graduales, por lo que no han tenido la misma
espectacularidad que un gran lanzamiento. Y es que la incorporación súbita de una cantidad tan importante
de innovaciones implicaba un riesgo para los estándares de calidad que Iveco persigue, tanto desde el punto
de vista del producto como de la formación de los técnicos de la red de asistencia. Iveco ha optado por un
proceso de renovación gradual, con el fin de poder probar cada innovación en su laboratorio, en las pistas
especiales y sobre el terreno, entregando unos vehículos a clientes-piloto. Paralelamente a las
presentaciones de las novedades, los técnicos de la red recibieron una formación adecuada y pudieron así
familiarizarse con las nuevas tecnologías.
Las etapas de la evolución de los pesados de carretera de Iveco
En 1998, Iveco presentó el motor Cursor 8, un 6 cilindros de 7,8 litros disponible en cuatro versiones del
EuroTech de 240 a 352 CV. Totalmente nuevo, el Cursor 8 incorpora una tecnología de vanguardia, con
inyectores-bomba de gestión electrónica accionados por un árbol de levas en cabeza, freno motor por
descompresión y un original turbocompresor de geometría variable, cuyas características se ajustan
electrónicamente a la necesidad de potencia. Su rendimiento récord (45 CV/litro) y su tara reducida (678
kg. en seco) han despertado un gran interés. Pero en sus cuatro años de uso intensivo en las tractoras para
la distribución medio-pesada, el Cursor 8 de 352 CV ha demostrado la validez de su planteamiento en
términos de fiabilidad y economía de uso. Con ocasión del lanzamiento del Cursor 8, la red de Iveco
recibió una formación específica sobre la gestión electrónica de los motores.
En 1999, el Cursor 10 de 10,3 litros de cilindrada apareció en los EuroTech y los EuroStar, en dos niveles
de potencia: 390 y 430 CV. La arquitectura de este motor es idéntica a la del Cursor 8. Las innovaciones
técnicas afectan a los frenos de disco integrales con control electrónico EBS y a la comunicación interna del
vehículo mediante el sistema CAN. La electrónica está presente también en el cambio de velocidades
EuroTronic, además de en la gestión del ralentizador. Iveco ha superado sin problemas la incorporación de
la electrónica y el Cursor 10, que equipa a la mayor parte de las tractoras de Iveco matriculadas en estros
tres últimos años, satisface las expectativas de los clientes en materia de fiabilidad y economía.
A finales del año 2000, el Cursor 13 de 12,9 l de cilindrada se incorporó a los vehículos de cantera y obra,
con una potencia máxima de 440 CV. A comienzos de 2001, la gama EuroStar se amplió con una versión de
480 CV del Cursor 13. Simultáneamente se introdujo el cambio de velocidades totalmente automático Euro
Tronic full automated. A cada incremento de cilindrada, el freno motor, alimentado por el turbocompresor
de geometría variable, ha sido adaptado para suministrar una potencia de desaceleración cada vez mayor,
hasta alcanzar los 400 CV en el Cursor 13.